Según el diccionario, el término independencia es semejante a libertad, por lo que creemos que ser independientes es hacer lo que se me venga en gana cuando yo quiera y como yo quiera, pero resulta que la verdadera independencia no consiste en eso. Ser independiente nos lleva a un reconocimiento diferente de la verdadera libertad.
Principalmente los jóvenes buscamos esa independencia por el historial enorme de interrogatorios y condiciones que nuestros padres hacen al momento de salir o realizar alguna actividad en donde ellos no están incluidos; ¿Donde..? ¿Cuando...? ¿Por qué? ¿Con quién? ... etc. O el típico condicionamiento de "vas a ir pero tienes que estar aquí antes de las diez.... y vas a llevar a tu hermano contigo" ... Son los momentos donde nuestra poca paciencia se agota y decidimos rebelarnos, haciendo lo contrario a lo que nos dicen o bien no haciendo nada de eso.
Déjame contarte una historia que leí sobre un chico que decidió ser independiente, este muchacho cansado de las condiciones de su madre y las preguntas incomodas que ella le hacía por las actividades que el realizaba, se rebelo y decidió no hacer caso a lo que su mamá le decía y haría todo lo contrario a lo que ella le dijera. Al principio todo parecía ir muy bien, según este muchacho estaba disfrutando su independencia pero ojo el no se daba cuenta de que era aun más dependiente de lo que su madre le decía, pues al decidir llevarle la contra dependía de lo que ella dijera para hacer lo contrario.
En muchas ocasiones el obedecer a nuestros padres parece que es una locura y esto nos genera muchos conflictos, pensamos que son unos anticuados, antiguos que no entienden lo que pasa hoy en día, pero es importante saber que al momento en que ellos te evitan que hagas o dejes de hacer algo es porque aunque tu no lo creas ellos ya pasaron por esa experiencia, quizá no en la misma época, pero la vivieron, Por ejemplo la biblia, fue escrita miles de años atrás y actualmente sigue siendo el mejor manual de vida que una persona pudiera tener, mismas situaciones presentadas de manera diferente. Entonces obedecer a tus padres es importante por varias razones: 1.- La biblia nos manda a que honremos a nuestros padres(Éxodo), y dentro de esa honra va la obediencia. 2.- ellos tienen mas experiencia que nosotros, por lo menos ellos te doblan la edad y ya pasaron por lo que tu estas pasando. 3.- simple y sencillamente es porque nos va bien, ellos se dan cuanta de que eres obediente y lo que antes no te permitan ahora lo permiten, te complacen, están orgullosos de ti.
Sin duda alguna jamás lograremos la independencia con la idea errónea que tenemos de semejante término, por lo que hay que estar consientes de que siempre dependeremos de alguien más en especial de nuestros padres, porque aunque no vivas con ellos sus consejos te ayudarán a no arriesgar o perder tanto en la toma de decisiones.
Entonces ¿Qué rayos es ser independiente?
Como ya lo dije independencia es igual a libertad, entonces ¿Cómo soy libre?. Según Juan 8: 31 y 32 debemos permanecer en la palabra de Dios (leer la biblia) y así seremos llamados sus discípulos, esto nos llevará a un conocimiento de la "verdad" que se refiere a Cristo, y esa verdad nos dará la libertad, es decir una independencia. Por lo que hay que reconocer que un día tendremos que salir de casa no pasaremos toda nuestra vida cómodamente en casa de nuestros padres porque siempre dependeremos de ellos, si, dependerás de ellos pero ahora de una manera distinta, aprenderemos que ser independiente conlleva a reconocer nuestras responsabilidades, a dar y no solo recibir, a valerme por si solo y no esperar que alguien más lo haga por mi y me resuelva la vida.
Reconoce que necesitas de alguien más para que tu vida sea dirigida, y la mejor guía para nuestra vida es Jesús, por medio de su palabra aprenderemos a enfrentar cada situación de la mejor manera posible, imagina que sería de un ciego si no se respalda en alguien para caminar o bien si no aprende a leer en su forma de escritura, podría tener muchos problemas, recuerda que Jesús es la luz que nos guía, si no estamos con el somos como un ciego pues la luz no llega a nuestros ojos. No seas un ciego y busca la luz y la libertad que solo Jesús con su gran amor ofrece.
Escrito por: Alex Arredondo
Basado en el libro "No me metan en la bolsa" de Lucas Leys
No hay comentarios:
Publicar un comentario